Me enamoré por mi deseo de ser protegida (trauma)

TRAUMA, TRAUMA, TRAUMA. 

Desde la adolescencia supe lo que es un trauma psicológico, no porque desde entonces estudiara psicología, sino porque una experiencia me marcó y dejó huellas emocionales que aún muchos años después se activan. 

En el periodo de secundaria sufrí el acoso de una chica que estaba dos grados arriba de mi. Desde el día 1 en esa escuela, viví un calvario pues cada  día se acercaba a amenazarme, agredirme, insultarme, etc. Jamás supe bien cómo reaccionar y creo que simplemente trataba de hacer como si no me importara, lo minimicé, hablé poco al respecto y traté de ser la adolescente felíz que era. 

Recuerdo salir por las noches, despedirme sonriente y luego caminar hacia mi casa muerta de miedo, se me aceleraba el corazón cuando escuchaba ruidos o pasos detrás de mí... sólo quería llegar a casa.  Sus amenazas me hacían fantasear en cómo iba a golpearme, en cómo me patearía, en que quizá moriría golpeada, pensaba en su grupo de amigas, todas pegando al mismo tiempo y obviamente todo esto me causaba terror, pues el cerebro no distingue imaginación y realidad... él igual va a mandar las señales al cuerpo, acordes a lo que dice la mente. 

Fueron años duros, pero al fín salí de esa escuela y me mudé de ciudad por cuestiones familiares, ahí debió  terminar la tortura psicológica, pero el trauma ya estaba en  mi cuerpo.

 

Ya viviendo en otra ciudad me sentía todo el tiempo alerta, al cruzar la calle en mi mente veía cómo era atropellada y mi cuerpo volaba por el aire, al ir en el transporte público iba nerviosa, en cada parada que hacía el chofer, imaginaba que un hombre armado subiría  a asaltarnos y ahí moriría. Después desarrollé un miedo completamente irracional, me aterraba abrir puertas, imaginaba que al otro lado encontraría una escena de terror, gente muerta desangrándose... En ese entonces a veces viajaba en autobús para visitar mi antigua ciudad y el viaje era realmente una angustia, cada curva la vivía en mi mente y mi cuerpo como una volcadura,  cada vez que el chofer frenaba un poco fuerte, en mi mente se desarrollaba toda una película trágica... ahora que lo narro no sé cómo pude vivir tantos años así, sin decirlo y sonreír a quien estaba conmigo  a pesar de estar viviendo un terror en mi interior. 

Años de terapia después todas estas fantasías se fueron disolviendo y aprendí a confiar más en la vida. 

Pero hubo más consecuencias....

Tiempo despúes conocí a un hombre que me contaba anécdotas de cómo había ejercido violencia de mil formas a otras personas, y lo único que mi corazón herido y  mi mente nublada veía, era SEGURIDAD,  (yo jamás tuve ese sitio seguro, jamás sentí que alguien podría protegerme y  de pequeña si lo necesité y mucho), yo sólo pensaba, "estando a su lado nada va a pasarme, el mataría por mi". 

Así que me aferré, me enamoré de él y tardé mucho en reconocer que cuando bebía de más,  se convertía en una amenaza  para mí, entonces revivía en mi cuerpo toda la ansiedad y terror de los años pasados, pero lo quería y además, aunque fuera a veces una amenaza para mi, sabía que él siempre estaba ahí para protegerme del resto del mundo. 

Afortunadamente la psicoterapia y la psicología siempre me han acompañado y al final de mucha lucha interior, salí de esa relación y de nuevo... a sanar....

Hace poco, estuve en una reunión fuera de mi ciudad, me quedaría  a dormir en casa de mi amigo, quien me invitó a esa reunión... por la noche decidí irme a dormir pues estaba muy cansada y  él decidió quedarse a beber solito en su sala, no le vi el problema, confío en él, lo conozco de años,   sé que él no tiene reacciones violentas, ni aún  tomado. 

El ruido de la música era tan fuerte que despertaba continuamente y escuchaba el sonido de las latas de cerveza cada vez abría una y  otra y otra y otra y otra... Escuché la última lata alrededor de las 6 am... pensé "ya debe estar borrachisimo" y comencé  enojarme, pero en realidad estaba angustiada, en mi cuerpo sigue la huella del trauma, y este tipo de situaciones activan mi trauma (aunque yo en ese momento no sabía), alrededor de las 7 am me asomé y lo vi ya dormido.... unas horas más tarde  cuando él despertó yo estaba muy ansiosa y no sabía por qué, pero ahora entiendo que fue  porque este tipo  de situación la viví muchas veces de un modo muy estresante....

Despertó y vino a donde yo estaba,  y de un momento a otro reaccioné  desproporcionadamente, creo que levanté la voz, estuve a la defensiva, no sabía ni qué me pasaba, ni cuál era el problema, ni de qué estaba tan enojada, no entendía nada, sólo quería huir... le decía que no se me acercara, y cuando se movía un poco hacia mi yo me hacía para atrás y le gritaba:  "no te acerques, no me toques" ...  todo mal... él no entendía nada y yo tampoco.... tiempo después intenté reparar ese daño, pero entiendo que yo actué como "una loca",  así parece si  el otro no es capaz de entender  el dolor, la memoria que detonó esa reacción. 

Y también fue una sorpresa para mí, porque después de tanto tiempo, pensé que eso era cosa del pasado pero mi cuerpo opina distinto, porque ahí se vive la huella del trauma.

Termino este post súper largo diciendo que muchas veces, cuando reaccionamos de forma desproporcionada a una situación, es porque esa es la manera en que alguna vez aprendimos a lidiar con una experiencia demasiado angustiante y se activa en nuestro cuerpo ese trauma con situaciones nuevas pero "parecidas" en algún sentido. En ese momento ya no podemos ver lo que realmente tenemos en frente, ya no estamos en contacto con el presente, estamos en contacto sólo con nuestro cuerpo en un estado de alerta y suepervivencia, y respondemos de la única forma que sabemos, pero la respuesta  no es acorde a la situación presente, es acorde a la memoria, a la  huella del trauma. 

 

Necesitamos un buen apoyo para revivir estas emociones y dar una nueva respuesta, un nuevo significado más acorde a la experiencia actual, por eso es importante la psicoterapia, la salud mental, conocernos, ir a lo más oscuro y doloroso de nuestras experiencias y salir renovados. 

Gracias si leíste hasta aquí. 🙏  Cuéntame, ¿has pasado por algo similar?

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